Caramelo, vainilla, toffee, azúcar, cacao, crema pastelera… Cuando una fragancia introduce notas dulces en su pirámide olfativa se la denomina gourmand por este toque azucarado que la hace tan gustativa. Se trata de perfumes que despiertan la memoria olfativa y que nos transportan hasta momentos de la infancia o a instantes de placer en los que rememoramos un bocado dulce y delicioso. Son perfumes apropiados para ser disfrutados en las estaciones frías del año, cuando buscamos composiciones que nos proporcionen una sensación confortable, de abrigo.
